¿Por qué este proyecto es importante?

Desde mi experiencia como arquitecta y fotógrafa documental, he aprendido que los espacios no solo son estructuras físicas; son testigos de nuestras historias, de nuestra capacidad para adaptarnos y transformar los desafíos en oportunidades. "100 días | 100 espacios de conexión" no solo es un proyecto arquitectónico, sino una representación de como la resiliencia, la identidad y el propósito pueden dar forma a un movimiento que trasciende fronteras.

Resilencia

Este proyecto, inspirado en mi experiencia como inmigrante, busca mostrar cómo la resiliencia y la pasión pueden convertir los desafíos en oportunidades. Mi objetivo es motivar a otros a encontrar en la creatividad la fuerza para transformar sus vidas.

Identidad

Esta idea surge de reconocer que los espacios que habitamos reflejan nuestra identidad, historia y valores. La arquitectura, como lenguaje universal, trasciende fronteras y celebra la capacidad de soñar, crear y transformar, convirtiendo los espacios en símbolos de unión y pertenencia.

Visibilidad

La visibilidad no se trata de reconocimiento, sino de conectar a las personas con ideas que inspiran y generan cambio. Este recorrido de 100 días es una manera de compartir esa historia con el mundo, de mostrar cómo un proyecto puede convertirse en un símbolo de acción y esperanza para generaciones presentes y futuras.

Un movimiento para trascender

Esta iniciativa más que un recorrido; es un llamado a la acción. Es una invitación a ser parte de un movimiento donde la arquitectura se convierte en un canal para la resiliencia, la identidad y el cambio global. Es un homenaje a las personas que sueñan en grande, que transforman ideas en realidades y que, como yo, creen en el poder de los espacios para conectar corazones y mentes.

100 días | 100 espacio de conexión no es solo mi historia; es la historia de todos los que alguna vez han tenido el valor de soñar, reconstruirse y de dejar una huella en el mundo. Te invito a formar parte de este viaje, a ser testigo de cómo la arquitectura y las personas se unen para crear lo extraordinario. Este es el momento de hacer visible lo invisible, de construir íconos que inspiren a las generaciones futuras.